Son los signos más comunes que indican adicción al juego:
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Preocupación por el juego
No poder apartar los pensamientos relacionados con juegos de azar, a pesar de lo mucho que se trate de bloquearlos.
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Tolerancia al juego
Sentir la necesidad de jugar cada vez más dinero y/o con mayor frecuencia, para alcanzar el estado psicológico que la adicción exige.
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Evasión
Jugar con el fin de escapar de los problemas o sentimientos de tristeza, culpabilidad o ansiedad.
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Pérdida de control
No poder dejar de jugar, sin importar lo mucho que se intente.
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Recuperar las pérdidas
Continuar apostando en un intento desesperado de recuperar el dinero perdido en apuestas anteriores.
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Mentir
Mentir para ocultar el grado de implicación en el juego.